Nos hemos mudado

Los padres capuchinos, después de diez años de ausencia, y queriendo que el convento de Taggia continúe la vida religiosa para gloria de Dios, para bien de las almas y alegría de sus habitantes, nos han ofrecido generosamente su casa. San Francisco que fue acogido por los monjes benedictinos que vivían en la llanada de Asís, desde lo culto del cielo, en agradecimiento, ha dado alojamiento a los pobres benedictinos!

Fuimos recibidos oficialmente por el obispo de Ventimilia el de agosto de 2019 ; dirigió la palabra a los numerosos fieles que vinieron, a los miembros del ayuntamientos, a la autoridad de los « carabinieri », a los vecinos y amigos.

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Las palabras de nuestro obispo nos han reconfortado y llenado de alegría ; aquí tiene la traducción de la respuesta del obispo a un periodista de Riviera Time :

“Como ya tuve ocasión de decir, es con alegría y gratitud, que yo acojo como un don del Señor esta comunidad en nuestra diócesis ; es un grupo pequeño, espero que el número de monjes consagrados al Señor crecerá y la oración aumentará, y que se desarrollará la vida religiosa del monasterio. Los monjes benedictinos han consagrado su vida a la oración, al estudio y al trabajo manual en una atmósfera de paz, de silencio, de caridad. Esta iglesia estará, por tanto, abierta a todos los que quieran unirse a la oración. Las misas serán celebradas con canto gregoriano y con el rito tradicional. Y creo que su presencia en nuestra diócesis, con su característica de ser guardianes y testigos de la más antigua tradición de la Iglesia, puede hacerle bien a todos fieles de nuestra diócesis.”

Como ustedes sabrán, los monjes buscan la compañía de Dios, de sus ángeles y de la Santísima Virgen. Su único apostolado es la oración.

“Los monasterios son dedos silenciosos dirigidos hacia el cielo, es un recuerdo persistente, invencible de que existe otro mundo, del cual este no es sino imagen que lo anuncia y prefigura.” (Dom Gérard Calvet).

La Iglesia está abierta a todos aquellos que quieren recogerse, unirse a la oración de los monjes y adorar al Señor presente en el sagrario. Los oficios se celebran en latín con canto gregoriano y la misa en Rito tradicional. Se comulga de rodillas y en la boca. Es importante guardar la modestia en el vestido, según la tradición de la Iglesia, las mujeres se cubran la cabeza (mantilla).

Si quiere ver a un monje o confesarse, puede dirigirse a la portería.

AJÚDENOS A RESTAURAR LAS PARTES DEL CONVENTO QUE LA REQUIEREN (Las referencias bancarias están en la columna derecha)

Los monjes se lo agradecen de corazón y no se olvidarán de usted y de su familia en su oración.